En un contexto de crecientes tensiones internacionales, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, volvió a expresar su apoyo al mandatario venezolano Nicolás Maduro. La llamada telefónica, ocurrida este 11 de diciembre de 2025, ocurre cuando la Administración de Estados Unidos intensifica operaciones militares y legales contra Venezuela y su supuesto vínculo con el narcotráfico, un conflicto que ha generado incertidumbre política y diplomática en toda América Latina.
Una llamada clave entre aliados
Según el Kremlin, Putin habló por teléfono con Maduro para reafirmar solidaridad con el pueblo venezolano y “apoyo a las políticas del Gobierno venezolano dirigidas a proteger los intereses y la soberanía nacionales frente a la creciente presión externa”.
Este intercambio fue el primero entre ambos dirigentes desde que Estados Unidos intensificó sus operaciones en aguas caribeñas, donde ha atacado embarcaciones que, según Washington, estarían vinculadas al narcotráfico.
¿Qué está en el centro de la tensión?
En los últimos meses, la Administración de Donald Trump ha aumentado la presión contra el gobierno de Maduro bajo la justificación de combatir el narcotráfico y el “narcoterrorismo” en la región. En este contexto:
- EE. UU. ha desplegado fuerzas militares en el Caribe y ha confiscado buques con crudo venezolano, lo que Caracas calificó de “piratería internacional”.
- Washington también ha sancionado a familiares de Maduro y altos funcionarios por presuntos vínculos con redes de narcotráfico.
- El espacio aéreo venezolano ha sido prácticamente cerrado debido al fuerte despliegue militar estadounidense.
Este aumento en la presión externa ha colocado a Venezuela en una encrucijada diplomática y ha generado advertencias internacionales sobre posibles consecuencias más amplias en la región.
La alianza con Rusia: palabras, no armas
Putin no ofreció compromisos militares explícitos durante la conversación, según los reportes oficiales, pero sí destacó la importancia de “proyectos conjuntos” entre Moscú y Caracas en áreas como economía, energía, comercio y cooperación cultural y humanitaria.
El Acuerdo de Asociación Estratégica y Cooperación entre los dos países, firmado en noviembre de 2025, apunta a reforzar estos vínculos sin especificar la entrega de armamento pesado ni apoyo militar directo.
Mientras tanto, la oposición venezolana y algunos gobiernos regionales critican el respaldo de Moscú, argumentando que podría legitimizar a un régimen acusado de prácticas autoritarias.
Región en alerta: voces internacionales y riesgos geopolíticos
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, advirtió que una escalada de confrontación con Washington podría tener “consecuencias impredecibles en todo el hemisferio occidental”.
Por su parte, líderes de la oposición venezolana y figuras de la comunidad internacional han pedido respeto al Estado de derecho y procesos democráticos, mientras algunos gobiernos vecinos alertan sobre el impacto que una crisis militar o política podría tener en América Latina.
La reafirmación de apoyo de Vladímir Putin a Nicolás Maduro llega en un momento crítico: mientras Estados Unidos intensifica su presión militar y diplomática sobre Venezuela, Rusia ofrece respaldo político y solidaridad. Aunque Moscú evita comprometerse públicamente con apoyo bélico, la conversación entre ambos líderes destaca la complejidad geopolítica de un conflicto que involucra soberanía, narcotráfico y rivalidades estratégicas entre potencias globales.